martes, 11 de junio de 2013

Análisis Económico: República Dominicana y Puerto Rico

Nunca he escrito sobre la economía del mundo y especialmente la de Puerto Rico y mi país, la República Dominicana. Estas escrituras van por la motivación de mi gran amigo e hijo, que me manifestó su deseo de que hablara sobre la situación económica actual.

El reciente informe de la Organización Internacional del Empleo (OIT) sobre la situación del empleo en el mundo es francamente alarmante. El informe mundial sobre el trabajo en el 2013 dice lo siguiente: en el último lustro, la incidencia del desempleo de largo plazo ha aumentado en un 60 por ciento en las economías avanzadas y en desarrollo para las que existen datos.

Info-empleo-informal_LRZIMA20130124_0001_11La organización internacional con sede en Ginebra puntualiza que en la Unión Europea hay unos 11.7 millones de desempleados de largo plazo (más de un año), por lo que se han desanimado y perdido la esperanza de conseguir un nuevo empleo. La situación explosiva está enmarcada en la crisis financiera y económica que cumple exactamente 10 años en República Dominicana y 5 en la burbuja de la construcción, el aumento de las acciones en la bolsa de valores, las ganancias desmedidas de dueños y altos ejecutivos y los bancos con crecimientos desmedidos. Todo ha contribuido a la crisis financiera, que ha dejado como secuela el desempleo, la pérdida de viviendas y la caída de la clase media, a las clases menos privilegiadas, a las pobres, a las de hambrunas de antaño.

La prensa internacional ha publicado en estos días unas nuevas causas para la crisis según los expertos de siempre, quienes recomendaron las actividades económicas que desembocaron en la crisis. Explican que lo que pasa es que los trabajadores y trabajadoras adquieren demasiados beneficios como algunos sueldos decentes, licencias por enfermedad, maternidad y muerte de familiares, planes médicos, etc. Alegan los “sabelotodo”, los economistas bien pagados, que hay que borrar los sacrificios y muertes de miles de mártires de obreros. Es más, los sindicatos y uniones, todo eso hay que eliminarlo del mapa. Hasta los mileuristas españoles están bien pagados y como saben de matemáticas y de números, suponen que son unos sabelotodo. billetes-dolarmoney

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Ahora, los expertos de siempre, recomiendan un salario mínimo de 6,500 pesos dominicanos al mes, por ejemplo, que es un equivalente aproximado a 325 dólares norteamericanos, es decir, esto para ellos es lo suficiente para vivir en una choza en la barquita, la guachupita o en un arrabal. Eso es lo que hay en República Dominicana, que prefirieren que los demás vivan en la ciudad, cubriéndose en invierno con una sucia manta. Es importante señalar que los dominicanos quienes ganan al mes menos de ese equivalente, es decir, unos 150 dólares norteamericanos al mes, solo sobreviven la vida.

Revolución IndustrialEn los países europeos, la crisis tiene a la clase trabajadora ahogada y con mal higiene. Usted, el ciudadano común, en un país sub-desarrollado como República Dominicana y Puerto Rico, en donde la vida es muy cara, el afán de lucro desmedido no es nuevo en el desarrollo de la sociedad. Durante el Siglo 18, con la Revolución Industrial, surgieron con fuerza arrolladora los propietarios que se enriquecieron con celeridad, creando fábricas, las industrias, la banca y dejaron a un lado a los amilanados aristócratas que no se pusieron las pilas a tiempo, pero esos empleos que se crearon eran una nueva esclavitud para los siervos. Se trabajaban 16 y 18 horas en talleres mal olientes y tóxicos. De hecho, los hombres y mujeres, con sus niños lactantes y pequeñines y menores de 8, 10 hasta 12 años, trabajaban día y noche dentro de esas fábricas, generando enfermedades hereditarias y todo un sistema de desesperanza. Ni tan siquiera recibían la paga que se merecía un trabajador común y corriente. Eran tiempos muy difíciles en todos los países del mundo y en República Dominicana, mucho más. Las uniones obreras y los sindicatos se forjaron para traer un poco de vida a la muerte prematura de los pobres. La jornada de ocho horas de trabajo costó sudor, sangre, cárcel y muchas lágrimas. En nuestra República Dominicana, también hubo cruentas luchas que nunca debemos olvidar. VICINI

Entonces, ahora los expertos sabelotodos dicen que la culpa de la crisis la tienen los obreros porque obtienen beneficios y que del afán obsceno de lucro de dueños ejecutivos y misceláneos a chichencles de los dueños y ejecutivos, que me quieren decir que la culpa de la crisis la tiene un policía o un mensajero de una industria, que luchan y que han luchado el derecho de tener vacaciones una vez al año y no el presidente del Banco Central dominicano, que vive en un palacio y gana millones de pesos o se los roba, al año. Ah, no, no…a mí que no me lo digan y tampoco se lo digan a los trabajadores de las industrias, que han negociado con sudor y mucho empeño, por un buen salario y por planes médicos que no garantizan a los pacientes de que los atiendan. Los administradores de las industrias y agencias públicas, se ganan miles de pesos de salario, beneficios y de bono anual. Se puede llamar entre comillas, salario, porque ellos, o sea, los ladrones del gobierno, todos los gobiernos, han hecho lo mismo para que el pueblo se “joda” con actitud de “Happy Go Lucky”. Los expertos de siempre, pasan la culpa a los inocentes. macondo

hipolito mejiaLos hacedores de la crisis financiera en República Dominicana, y no fue Hipólito Mejía, que no es santo de mi devoción y del masivo desempleo mundial, no asumen responsabilidad por sus actos; en vez, se retiran a su isla en el Caribe o en el Mediterráneo para analizar la situación de lejos y ver desplomarse una vez más al pueblo dominicano y los sueños de esos trabajadores desposeídos de alcanzar, de una vez y por todas, el pedacito de ese cielo que les garantice felicidad, por lo menos, el derecho a vivir como seres humanos libres o con dignidad. No existe para ellos tal pobreza; no existen los pobres.

Por tal razón, siempre digo que los ladrones de Leonel Fernández y Danilo Medina se creen que es verdad, que República Dominicana es “New York”, mejor dicho en mi léxico, ellos creen que el pueblo dominicano vive en la ciudad de García Márquez, en Macondo.

Por favor, perdonen que hable de una economía general, más luego hablo de la individual.

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