miércoles, 28 de noviembre de 2012

Las Cosas Caminan Diferente

Dos pueblos hermanos y hechos a la medida histórica: República Dominicana y Puerto Rico. La “Nueva Quisqueya” en San Juan, tiene varios objetivos que se convierten a su vez en sus principios fundamentalistas. Obviamente, la colonia dominicana en Puerto Rico no cuenta con un medio de orientación. Es nuestra intención, a través de este escrito, destacar la aportación de la diáspora dominicana en Borinquén; difundir su quehacer cultural, económico y social desde la perspectiva más edificadora posible. Hacia eso vamos.

Ahora bien, pasadas ya algunas décadas la inmigración de los ciudadanos dominicanos a territorio estadounidense ha tomado niveles verdaderamente imprevistos. Aquí en la isla, de acuerdo al último censo poblacional federal, la cifra alcanza alrededor de 200 mil inmigrantes dominicanos. Sabemos que el número es mayor en la zona metropolitana, donde más arraigo tiene esta comunidad, en todos sus órdenes.

Vamos al punto, no se puede tapar el cielo con la mano, cuando estas dos comunidades interactúan diariamente en Santurce y Rio Piedras. Vemos el roce, oímos despectivos comentarios, en fin, se desarrolla una dinámica racista y en algunos casos, peligrosa.

Ambas ciudadanías tenemos que recordar nuestra unión a través de la historia, cuando Ponce de León llegó al Nuevo Mundo en el año 1502, junto a Nicolás de Ovando. Durante sus primeros años en América, Ovando enfrentó la resistencia de los indígenas en La Española, hoy día comprendida entre la República Dominicana y Haití. Fue nombrado gobernador de la provincia de Higüey, situada al este de la República Dominicana. Fue precisamente aquí donde Ovando escuchó  hablar de la gran cantidad de oro que había en Borinquén; isla que inicialmente se le denominó San Juan, situada a 80 kilómetros de la isla, La Española. En 1508, Ponce de León solicitó a Ovando permiso para explorarla y por las grandes riquezas encontradas por los colonizadores, fue nombrado gobernador de Puerto Rico.

Las instrucciones recibidas por Ponce de León fueron precisas; durante la exploración de la isla borinqueña, se debía procurar una relación amistosa con sus pobladores, prohibiéndose la esclavitud de éstos y la utilización de sus recursos alimenticios. Se propuso además, propiciar un ambiente de paz para que los aborígenes no albergaran temor alguno. Se instruyó que los exploradores establecieran labranzas propias y garantizaran la seguridad de los colonos, sin embargo, las cosas no sucedieron así.

A su llegada a Borinquén, Ponce de León fundó la ciudad de Caparra. De hecho, el primer asentamiento europeo en Puerto Rico fue recibido, esto un dato importante, de manera amistosa por Agüeybaná, principal cacique de las islas, el que según los historiadores, le atribuía a los españoles origen divino, entiéndase inmortales. Ponce de León, junto al cacique, se internaron en las islas en busca de oro, siendo conducido a los ríos Manatuabón y Cebuco, encontrando allí grandes cantidades del preciado mineral. Con esta prueba de la existencia de oro en la isla explorada, Ponce de León regresa a Quisqueya y obtiene el título de gobernador de las islas borinqueñas.

Instaurado como gobernador, Ponce de León obligaba a los nativos a trabajar y a pagar tributos a cambio de recibir educación y protección por parte de los colonizadores. Esta situación provocó la rebelión del cacique Agüeybaná II, sucesor de su tío Agüeybaná I. Tras su fallecimiento, Agüeybaná II logra entonces la unificación de todos los caciques rebeldes e instauran un estado de sublevación a toda la isla. Ponce de León los captura y ejecuta, sin piedad, aplastando la rebelión taína. Los nativos sobrevivientes huyeron a los montes, uniéndose a los Caribe, con propósito de hostigar a los europeos. 

No podríamos excluir el nombre de un personaje que, por un lado causó la resistencia de nuestros aborígenes, unidos contra la presencia europea en las Antillas y contra otras dos islas caribeñas que comenzaron a desarrollarse socio-culturalmente con elementos de igual forma y contenido. Nos referimos al español, Diego Salcedo, quien fue asesinado por los taínos para demostrar la mortalidad de los invasores. Por tal razón, cuando hablamos de Puerto Rico y República Dominicana, pienso en las veces que hemos luchado juntos para de una forma u otra, decir basta ya de que nos opriman. Basta ya de los abusos con nuestro pueblo del Caribe.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Para un maestro andante de la calle del Condado

Hoy no dejo de llorar y digo, maldito los pueblos que no reconozcan su gente buena… 

¿Quién será este señor que con su cabeza fría, camina por plazas, calles y lugares del Condado con su camisa, pantalón, gorra, haraposas? ¿Quién es este genio de las matemáticas, que día a día muestra su paso por la ciudad del Condado; siempre mirando profundo, como miran los más sabios de los tiempos ancestrales del viejo continente europeo? 

Con amor, mírenlo y deténganse a hablar con él; no cuesta. Se aprenden historias de cuando era un joven maestro de matemáticas, uno de aquellos “robles” que no hay quien los doble. ¿Dónde estarán aquellos alumnos y alumnas que en el Señor hacer hoy y ayer a ser hombres y mujeres de bien, los verán y no pararán sus vehículos a saludarlo y decirle: “¡Hola, Mister!”.

¿Quién será esa luz brillante que lo fue él? ¿Dónde están los que pueden hablar de esta luz apagada, que el tiempo vence? ¿Cuándo aparecerá alguien que diga: “Ah, este es el Mr. Viera, que nos dio matemáticas y nos ayudó? 

La expresión de los compañeros de la escuela produce un poderoso efecto familiar para Ismael Viera, que tiene unos valores sanos por los cuales es muy probable que el que lo ve en las calles del sector del Condado no sepa que hay un genio en este caballero andante. Un gran número de los padres del Condado deben presentarle a sus hijos al caballero andante. ¡Cuán amoroso, disciplinado, elocuente maestro!

Hombre brillante, inteligente, sabio con los números, que camina calle arriba, calle abajo; sin saber dónde comer y dormir. Hombre de pensar; tranquilo, pausado. No lleva cuenta del daño. Discípulo de dos grandes de la materia, que nunca les dieron su mérito por ser negros: Isabelo Cenón y Rafael Cordero. No se regocija por la injusticia, sino que se regocija con la verdad. Todas las cosas las soporta, todas las espera, todas las aguanta. El amor nunca le falta ni le falla.

Deténganse un momento y mírenlo como si fuese su padre. De los buenos hombres como él, aún caminando sin casa, pan o compañía; para ti, son los cielos de los benditos. No puedo más que dedicar mi tiempo para hacerte un escrito de Dios. Voy a cerrar este escrito con un texto de la Biblia: “El amor es sufrido y bondadoso. El amor no es celoso, no se vanagloria, no se hincha, no se porta indecentemente. No busca sus propios intereses, no se siente provocado.

Para ti, Ismael Viera, va mi agradecimiento por tu tiempo para enseñarme el porqué vivir en paz, en amor y felicidad, todos los días de tu vida; y recuerda que desde muy lejos del Caribe, vine a trabajar por la sociedad, de este pueblo, que sin ti, fuera diferente. Si faltaras tú, faltaría tu enseñanza de amor. A ti, Ismael, genio de los números, mi pensamiento y mi agradecimiento, aún sin ser de tu país.

martes, 13 de noviembre de 2012

Un ladrón buscando excusa


El ex-presidente Leonel Fernández no tiene que decir nada hoy en la radio que no sea donde está el dinero que él y sus amigos le robaron al país, que lo dejan con un déficit increíble en toda la historia de la República Dominicana. Ningún presidente había cometido tanto abuso con el pueblo. Este pueblo pide justicia para los ex-funcionarios del gobierno de Leonel Fernández, que se robaron el futuro de muchos niños y personas de tercera edad. Una alocución no es suficiente.

Señor Leonel Fernández, los bienes saqueados del país, tanto usted como su esposa la hoy Vicepresidenta del país, deben reponerlo al erario público. Un gobierno títere, delincuente… este pueblo lo menos que puede pedir es prisión de por vida para usted y sus camarillas de ladrones. Alibabá y sus 40 ladrones le quedan pequeños.

Por amor al prójimo


Hoy, a mi cabeza llega algo, pensando en las elecciones de Puerto Rico. Pienso que las elecciones son un momento histórico para un diminuto análisis de la sociedad puertorriqueña y latinoamericana.

En un país como este, cualquier persona debe mirarse por dentro y preguntarse: “¿Quién soy yo? ¡Ah, pero soy un ser humano! ¿Tendré algo de un animal y no razono?”

Nunca antes había visto tanta injusticia en un pueblo en donde todas las esquinas hay una iglesia. Digo esto porque el 6 de noviembre, el pueblo de Puerto Rico y los Estados Unidos, eligieron nuevas autoridades para dirigir los destinos de estos países, pero lo triste es que en Puerto Rico, la sociedad da pena y vergüenza. Pueden elegir al gobernador, al representante y a los senadores, pero no pueden elegir a un joven abogado, brillante, inteligente, honorable, hombre de familia, respetable, inmaculado y lleno de honor, como lo es el señor Cox Alomar, por este ser negro.

En este país, si se puede llamar país, que todavía la gente no reconoce el valor del ser humano, de la raza o “de color”, los ciudadanos no pueden hablar de Dios y profesar a Cristo en la Iglesia porque Jesucristo, a todos los miró con amor. Cox Alomar tiene tanto valor como García Padilla y los demás.
¿Quieres una muestra más? La alcaldesa, Persa Rodríguez, que perdió su candidatura y en los carros de su pueblo andaban los simpatizantes del ganador con monos chimpancé y pancartas que decían, “¡FUERA ESA MONA!”, refiriéndose a la saliente funcionaria, que es una señora de color.  La piel está llena de identidad que probablemente el día que ella brinde amor, brillará la luz de Cristo Jesús sobre ella. 

Eso muestra que todavía queda mucho trabajo; vamos a ver cuando cambian las cosas.
Distinto a Estados Unidos, donde el racismo y la lucha contra ese tipo de discrimen se manifiestan a flor de piel, dos veces se ha elegido un presidente negro. La sociedad identifica en Puerto Rico un racismo particularmente peligroso por la falta de admisión, entonces la gente actúa desde el racismo de manera impropia. Este racismo, es aparte del clasismo rampante de la misma raza negra, porque el hombre negro que tiene dinero en la isla, no se relaciona con negros de sectores marginales como Llorens Torres, Loíza, Barrio Obrero o Cabo Rojo y el resto de los 78 municipios.

La manera en que se enseña la herencia indígena, española y negra,  muestra a los negros en una posición de inferior. Te dicen que ser negro es ser un esclavo, pero el ser negro no nos hace ser malvados o criminales, que no podemos ocupar cargos a nivel de gobierno o de agencia privada. Esa es la importancia de la lucha de los derechos civiles, que no le enseñan a los jóvenes de este país.
Yo puedo durar hablando de gente buena de la raza negra como Ruth Fernández, Betances, Antonini, Rosa Parks, Martin Luther King Jr., Alomar, Clemente, Trinidad, Cotto, las hermanas Williams, Tina Turner, el doctor José F. Peña Gómez, Romeo Santos, Sammy Sosa, Michael Jackson, Matía Mella, Ghandi, Rafael Cordero, Tite Curet Alonso, entre otras personas del ámbito artístico y profesional. 

Basándome en el artículo que conseguí en www.erroreshistóricos.com, Hamilton Naki fue jardinero en la Universidad de Ciudad del Cabo, limpiaba las jaulas del Departamento Médico y trabajó como anestesista de animales y gracias a su destreza, hizo posible el primer trasplante de corazón humano (aprendió cirugía presenciando operaciones con animales). Se le dio crédito a Christian Barnard y cuando se le preguntó a su equipo sobre Hamilton, dijeron que era un empleado del servicio de limpieza, porque era negro.

Para aquellos que sientan que ser de raza negra no conlleva ningún mérito, que sientan que son menos que los demás, los dejaré con un te amo, los amaré por siempre. Estaré siempre a su lado y lo único que les pido es que acepten mi amor. Te guardaré en mi corazón y te bendeciré por siempre. Te amaré como eres. Que me digan que sí y que me dejen amarlos a todos ustedes. Cualquier negro o persona racista, de un país bendecido por Dios, por su gente, que ponen el corazón falso en Dios y dicen que son cristianos, están muy lejos de la verdad. No importa si vienes de la China, de América o del Polo Norte. Con mi amor al prójimo incluyo a los blancos, amarillos, negros, negras, todos los colores y todas las razas. 

Viva Persa Rodríguez, una señora de honor; Viva Cox Alomar, que de ellos será el cielo.

Que vivan todas las razas del mundo.