viernes, 10 de abril de 2015

El pez muere por la boca

Puerto Rico, 9-15-2015

Siempre voy a recordar a mi abuela materna Doña Dolores Peña, una vieja de un campo que siempre me decía: “Tu eres como el pez”. Y yo preguntaba: “¿Abuela, y cómo es el pez? Y ella me contestaba que el pez muere por la boca. Por tal motivo, sigo diciendo, que el bandido y fíjense que usé la palabra bandido, para mencionar al ex presidente Hipólito Mejía, que en todo momento, pienso y digo que este nunca quiso que el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), ganara las elecciones del 2012, y así tampoco va a ganar las Convenciones del Partido Revolucionario Moderno (PRM), por bocón.

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https://www.youtube.com/watch?v=0VumsuaWL7c

¿Por mí? Por mí nunca ganará unas elecciones de ningún tipo, en el nombre de una mujer seria, más por todas las trabajadoras domésticas; esa mujer era mi mamá.

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indexQue piensen los asesores de este patán, cuantos familiares de homosexuales hay en República Dominicana que votan, y cuántos gays tiene nuestro país, que en una competencia eleccionaria votarían, y cada vez, recuerden las expresiones de este bocón, los castigarán y recordarán que estos “maricones”, o “mariconcitos”, como el dijo, se vengarán. Cada “gay” se compone de un sistema dominó, así que nadie sabe cuántos se sumaran, por uno. Le recordaré Señor Hipólito Mejía, que la libertad no es libertad, si alguien se adueña de ella.

 

 

 

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images222Señor Hipólito Mejía, si es que le puedo llamar señor, soy familia de un joven muy brillante. Cuando mi sobrino estaba vivo, tenía cuatro carreras universitarias y no cambiaría mi familia por ninguno de los hijos suyos.

Usted es un dinosaurio engreído, arrogante y racista, porque su odio hacia las personas que piensa diferente a usted no es de esta generación. Pero, el Dios Divino del cielo, no el Dios de todos como usted, hara justicia.

 

 

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Por momentos pienso cuántos funcionarios de sus gobiernos le negaron trabajos a jóvenes llenos de capacidad y deseo, y por el simple hecho de verse diferente no obtuvieron el mismo. Voy a terminar dejándole saber que Dios lo perdone por todo su odio y que el pueblo dominicano, mi pueblo no, y que la paz lo haga morir en manos de un doctor y enfermero gay, lleno de amor.

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