Por, Héctor Peña, para un pueblo con amor y tolerancia por los niños y jóvenes que no sufran maltrato de nadie.
La gracia de Dios en la vida de Nehemías se basó en saber pedir. Llega el momento en que el rey le pregunta: ¿qué quieres?, a lo que Nehemías responde: “oro”. Dios le dice como pedir y Nehemías pidió madera; primero para el palacio del rey, luego para la ciudad y después para él, y un copero terminó viviendo con madera del palacio del rey porque supo pedir.
La mayoría de las oraciones de la gente en la iglesia es dame algo para mi, para después yo hacer por otro, pero si quieres ganarte el corazón del rey, debes pedir madera primero para él, luego para completar tu destino, reconstruyendo la ciudad y después para ti, dice la Biblia, que el rey se dio cuenta de que Nehemías estaba triste.
A Dios le importa y Dios va a poner a alguien que no tan sólo le importe, sino que te pueda ayudar. Dios sabe los que ha quebrantado tu corazón y está esperando el momento correcto, en el lugar correcto para posicionarte con la persona correcta, que se va a dar cuenta y va a proveer para tu vida. Esto no ocurrió en la vida de Nehemías en cualquier momento, sino cuando el vino estaba por delante del rey. El vino representa revelación. Donde único tu corazón debe ser mostrado, es donde hay vino, donde hay revelación porque el mundo no te puede ayudar; pero a Dios si le ocupa lo que entristece tu corazón.
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